jueves, 25 de junio de 2009

Actividad conjunta con los alumnos de la Escuela Infantil "La Linterna Mágica". Dibujos en el aire.

El 29 de mayo los alumnos de 2ºB de E.S.O. fueron a la Escuela Infantil "La Linterna mágica".
Pasamos parte de la mañana allí.
En primer lugar, nos presentamos, les dimos a los niños los autorretratos que habíamos hecho en clase previamente y cantamos y bailamos.
Una vez que ya nos sabíamos los nombres de todos, nos hicimos retratos unos a otros sobre acetato que habíamos pegado en marcos. Además, dibujamos las siluetas de los niños en un plástico montado sobre un bastidor grande.
Después jugamos en el patio con nuestros nuevos amigos y, antes de irnos, las chicas de la Escuela nos invitaron a desayunar.
Fue una actividad muy entretenida y aprendimos mucho con los pequeños.


Animación a la lectura II. La piel de África

El día 26 de mayo estuvo en el instituto el escritor Heinz Delam para charlar con los alumnos de primer ciclo sobre su libro "La maldición del brujo-leopardo".

Esta actividad ha sido realizada por el Departamento de Lengua castellana y Literatura, dentro del programa "Encuentro con autor" organizado por la Biblioteca Municipal "Antonio Machado" de Fuenlabrada.

Como actividad final relacionada con la lectura del libro, los alumnos de 1ºC el pasado lunes 22 decoraron su piel con henna o alheña (del árabe الحناء al-ḥinnā´), un tinte vegetal utilizado para el cabello y para hacer tatuajes temporales.



Este tatuaje se llama mehndi. Se realiza en gran variedad de culturas desde Asia hasta el Mediterráneo, pero sobre todo es más conocido y practicado en entre árabes e indios.
Y aunque el mehndi más característico es el de la boda, en realidad este adorno de la piel se puede hacer para celebrar cualquier acontecimiento feliz (embarazos, nacimientos) porque se le atribuye la propiedad de propiciar la buena suerte y la prosperidad, y la de alejar los malos espíritus.

En este vídeo puedes ver todo el proceso de un tatuaje temporal de henna:



Y, si quieres aprender más sobre la henna, puedes entrar en este blog

lunes, 22 de junio de 2009

Pueblos abandonados VII. Noche cerrada en Umbralejo.

En toda población que se precie suele haber presencias (llamémosles fantasmas, almas en pena, espíritus,...).
En Umbralejo, a pesar de estar deshabitado, no podía ser menos y, una noche sombría en la que solo se oía el rumor del viento por las calles desiertas, Montse nos contó la historia de Ceferino.
Para todos los que no habéis estado en Umbralejo, aquí os dejo esta transcripción del relato, encontrada en wikipedia, que es prácticamente la misma que oímos de sus labios:

"Os voy a contar una historia completamente real sobre un hombre que vivió aquí en Umbralejo hace... no sé, unos cincuenta años. Murió en 1943 o 1944, no lo sé exactamente. Bueno, este hombre; Feliciano Ablanador era asturiano, del norte de Asturias, casi lindando con Cantabria. Feliciano emigró desde su tierra y se vino a este pueblo, Umbralejo. Nadie sabe porque eligió este pueblo Feliciano pues en aquella época Umbralejo era un pueblo escondido en un pinar le da Sierra de Ayllón. No era un pueblo famoso que se conociese fuera de Guadalajara, como ni siquiera lo es ahora. Además, Feliciano no tenía familia en el pueblo, ni tampoco en ningún pueblo de alrededor, como puede ser Valverde o Zarzuelilla. Era cuanto menos extraño.
Feliciano era un hombre a los que en aquella época se llamaba pudientes. Era el hombre que más dinero tenía en el pueblo. Su casa era la más grande y la más lujosa. Era un hombre arisco y en el pueblo no le tenían demasiado aprecio. Siempre vestía con un traje de época. Con pantalones grises, viejos y rancios de trabajar en el huerto que tenía a las afueras del pueblo y que usaba como entretenimiento en la primavera. Al contrario que los demás lugareños que llevaban una boina y un chaleco, él siempre llevaba un sombrero abombado que en su tiempo debió ser de color negro, pero que con el desgaste de los años ahora era más bien grisáceo. Vestía también una camisa a cuadros y una chaqueta gris para el frío. Tenía siempre una medio barba canosa, no muy larga, la cual le daba un aspecto más autoritario.

Feliciano se juntó a los cuarenta y cinco años con una moza del pueblo que tenía unos treinta. Para aquella época esas eran unas edades ya muy tardías, pero el cura del pueblo no puso impedimentos para casarlos.
El día del casamiento, todo el pueblo estaba de fiesta. Normalmente cuando en un pueblo se casaba alguien, hacían una fiesta que duraba tres días y era entonces, tras la boda, cuando los novios tenían derecho de Dios para consumar el matrimonio.


A pesar de que aquella mañana se sentía muy mal, Feliciano contrajo matrimonio con aquella moza en la iglesia del pueblo, y aquella misma tarde, Feliciano cayó en cama y falleció. Según reza en sus papeles de defunción, que los tenemos nosotros aquí en el pueblo, falleció de una bronconeumonía, que era una enfermedad bastante común en aquella época en regiones mineras como es en la que se encuentra Umbralejo. Lo más extraño de todo es que dejó como única heredera de toda su fortuna a su mujer, la cual tras el fallecimiento de Feliciano abandonó el pueblo.
Feliciano murió sin consumar el matrimonio y ahora se dice que Feliciano vaga por el pueblo.

No es un fantasma maligno, solo se divierte encendiendo y apagando luces y abriendo y cerrando alguna puerta que otra. Si alguna vez os pasa algo de esto en el pueblo, no os preocupéis que no os va a suceder nada malo. Solo es Feliciano que tiene ganas de jugar con vosotros.
Bueno gente, ¿qué os ha parecido la historia? Si alguien no se la cree podemos enseñarle los papeles que encontramos de Feliciano en el pueblo -dice Montse- De la mujer de Feliciano no hemos encontrado ningún papel, no se sabe nada de su familia ni de su apellido, en la ficha solo pone Carmela Ablanador, mujer de Feliciano Ablanador. Supongo que estarán escondidos en algún lugar del pueblo".


Como comprenderéis, la fotografía no es de Feliciano y Carmela Ablanador. De hecho, ni siquiera se corresponde con la época del relato: se trata de un retrato de gabinete de una pareja de finales del s. XIX.

domingo, 14 de junio de 2009

Día Internacional de los Museos

Con un poco de retraso, el pasado martes 9 de junio celebramos el Día Internacional de los Museos en el CEART Tomás y Valiente de Fuenlabrada.
Los alumnos de 4º D de E.S.O. y los niños de la Escuela Infantil La Linterna Mágica disfrutaron de la exposición del grupo El Paso con un cuento sobre un grupo de animales artistas y realizamos una obra colectiva.


sábado, 13 de junio de 2009

El taller del artesano I

Y, en "el taller del artesano", una muestra de los trabajos que han realizado los alumnos de la optativa de Artesanía que imparte Emilio Laut.

Aquí podéis ver trabajos elaborados por vuestros compañeros con distintos materiales y técnicas artesanales: objetos de cerámica, pintura sobre seda, objetos forrados con papel jaspeado o con papel reciclado, cerámica decorada, objetos de cristal decorados y cuencos hechos con papier machè,...


domingo, 7 de junio de 2009

Pueblos abandonados VI. Proyecto de centro: Una cocotilla en Umbralejo

Para optar a la participación en el programa educativo "Pueblos abandonados" hay que presentar un proyecto previo en el que estén reflejados los objetivos que se pretende conseguir y el proyecto de centro: la actividad (o actividades) que se va a desarrollar tanto en el pueblo como en el centro escolar antes y después de la estancia.

Nuestro proyecto inicial estaba destinado a un grupo de alumnos de 4º de E.S.O. pero, debido a problemas de calendario y edades, tuvimos que adaptarlo a los alumnos de 3º que fueron los que finalmente participaron.

Aparte de la realización de un libro desplegable en el que reflejamos tanto lo que hemos vivido en Umbralejo como lo que hemos aprendido allí sobre la vida rural, teníamos previsto llevar a cabo una intervención artística.

Antes de ir, habíamos visto en clase distintos movimientos de creación contemporánea en los que es fundamental la naturaleza (Land Art); la participación activa (Arte colaborativo, en el sentido planteado por Claramonte y Rodrigo de construir las condiciones concretas para un ámbito de libertad, para liberar una obra de arte... ); la influencia del paso del tiempo en una obra (Arte efímero).

De las distintas corrientes nos interesaba sobre todo el carácter intimista del Land Art de autores europeos que tienen una relación de coexistencia con la naturaleza (Richard Long, Andy Woldsworthy, Hamish Fulton, Miguel Ángel Blanco) alejados de la grandielocuencia de los primeros artistas americanos cuyas intervenciones cambiaban radicalmente el paisaje.

Por ello, decidimos hacer una intervención basada en la utilización de elementos naturales encontrados en nuestros paseos por Umbralejo y elegimos un dibujo realizado por un artista argentino: Gustavo Aimar. Para conocer sus ilustraciones podéis entrar en cualquiera de sus blogs (mucho mejor en ambos): en "Aimar ilustrado" o en su "Mesa de trabajo"

Aimar había hecho una convocatoria con motivo de la celebración del 2º aniversario de su blog. Proponía la reinterpretación de un dibujo suyo realizado para la ocasión y la publicación de estas intervenciones en un blog creado especialmente para ello.

El "pajarraco", como él mismo le llama, fue rebautizado en Umbralejo como "Possssho" por aquello de su procedencia (hay que leerlo con acento argentino) y como "Cocotilla".

Desde este blog, le agradecemos a Gustavo su generosidad por esta posibilidad que nos ha brindado para participar en un proyecto tan creativo y enriquecedor y por el hecho de que, a pesar de la falta de tiempo que le ha obligado a cerrar la convocatoria, haya incluido en el blog a nuestra "Cocotilla".

sábado, 6 de junio de 2009

Pueblos abandonados V. Mayo en Umbralejo

Hace tres semanas estuvimos en Umbralejo. Necesitaría un blog completo para poder contar todo lo que la experiencia ha supuesto para todos pero intentaré resumirlo en un par de entradas.

El domingo llegamos, después de unas cuantas curvas más de la cuenta porque el conductor del autobús se pasó el desvío de Umbralejo y nos acercó hasta Galve de Sorbe. Los alumnos del otro centro ya habían llegado desde Jaen, de Torredonjimeno para ser más exactos. Dimos un paseo por el pueblo y conocimos algo de su historia y de sus antiguos habitantes. Después nos informaron sobre las actividades que realizaríamos esa semana y sobre la organización del pueblo.

Las casas en las que dormíamos (algunos muy poco...) eran tres: la veleta, la casa grande y la casa pequeña. Todas ellas construidas con pizarra y rehabilitadas en los primeros años del programa.

Han sido seis días llenos de actividades: por las mañanas, después del desayuno, empezaban los tajos: cuidado de los animales, recoger estiércol, cuidar plantas, reconstruir muros o (como en nuestro caso) trasladar piedras hasta el manantial que abastece el pueblo y colocarlas en el cauce para que se filtrara el agua y perdiera el exceso de hierro y para que las vacas no enturbiaran el agua y, por último, limpiar las zonas comunes. Las tardes estaban dedicadas a los talleres (de cerámica, cosmética natural, reciclaje, encuadernación, primeros auxilios y relajación, fragua, textil, cestería, cocina tradicional) y al proyecto de centro.
Aquí tenéis imágenes de las distintas actividades:



El martes celebramos el Concejo: una reunión en la que realizamos una evaluación, valorando lo negativo y positivo de los dos primeros días en Umbralejo y haciendo propuestas (y enmienda) de mejora.

El miércoles fue un día especial: hicimos una excursión a Valverde de los Arroyos y, desde allí fuímos a las Chorreras de Despeñaelagua, a unos 2 km, donde comimos. Por el camino nos fueron explicando las distintas especies vegetales y qué uso se hacía de ellas. La marcha tuvo su momento "de acción" cuando, poco antes de llegar a Valverde, pasamos cerca de unas cuantas colmenas. No hubo que lamentar más que un picotazo de una de ellas que se empeñó en castigar a Milagros, la profesora jienense y, ya de vuelta, el empecinamiento de un par de ellas que se metieron en la melena de Almudena (esta vez, sin mayores consecuencias). Fueron alrededor de 18 km en los que disfrutamos de un paisaje maravilloso y de estupendas vistas del (pico) Ocejón.

El jueves seguimos con el horario habitual y por la noche Montse (la monitora que lleva la animación de Umbralejo) nos contó algunas de las historias y leyendas más espeluznantes. Esa noche nadie se atrevía a salir de las casas a solas, entre otras cosas porque José María, el maestro de Torredonjimeno, es especialista en asustar al personal y, en cuanto uno se confiaba, daba un golpe en una contraventana, abría una puerta que chirriaba,... y nos daba unos sustos de muerte ¡¡Maeeeeestrooooooooooo!!

El viernes fue un día distinto a los demás porque ya se barruntaba el fin del viaje y porque dedicamos buena parte de la tarde a preparar la fiesta de despedida. Nos dividimos en grupos: uno de ellos realizó un mural de recuerdo con el nombre de los dos centros, otros diseñó los diplomas para los participantes y un tercero, preparó una obra de teatro en la que se resumía lo vivido en esos días.

Después de la cena, disfrutamos de la fiesta: vimos el teatro, bailamos, cantamos en el karaoke, hicimos fotos, tuvimos hasta un desfile de modelos y un par de gogós de los más fashion. La última noche fue muy especial sobre todo porque nos acostamos mucho más tarde y se permitió el cambio de "residencia" por unas horas.

Pero con el sábado llegó el momento de la despedida. Tras compartirlo todo durante una semana con los chicos -y los profes- de Torredonjimeno y con la "gente" (que diría Montse) de Umbralejo, cada uno se subiría a su autobús y volvería a su vida cotidiana. Las lagrimas ocuparon el lugar de las risas, nos abrazamos y nos besamos como si nada nos pudiera separar y nos comprometimos a preparar para el curso próximo un proyecto conjunto para poder repetir una experiencia tan maravillosa... Promesa que sigue en pie.

Así que solo me queda decir:
Gracias a todos los que habéis hecho posible esta maravillosa semana y... ¡¡¡Nos vemos en Umbralejo!!!